Yero Chuquicaña Saldaña

Nació en Ilo, 1990, Yero ha publicado los dos primeros tomos, “Air-Max 180” y “Taca-Taca”, de su colección Falsos Cuentos el año pasado, de la mano de Aletheya, que llevó a considerarlo la revelación de la narrativa contemporánea del sur.

Yero ha llamado la atención de la crítica local por su lenguaje sencillo y directo, una estética marcada, sus personajes bien logrados y un estilo narrativo que oscila entre lo insolente y lo fresco.

“¿Qué carajo es el amor?” es el tercer libro de Yero, dentro de las serie Paradero Prohibido, y marca una pausa entre los próximos tomos de la colección Falsos Cuentos, “Chicito” y “Wakman”, que verán la luz más adelante este año.

PRODUCCIÓN LITERARIA:

- Air-Max 180
- Taca-Taca
-  ¿Qué carajo es el amor?
       * Fecha de publicación: Primera edición, 2016
       * Editorial: Aletheya E.I.R.L.
       * Índice:
                     - Los Amantes
                     - Catástrofes importantes
                     - Desayuno en bus cama
                     - Colca canyon
                     - Solo combis
                     - El pezón hundido
                     - Samsung
                     - ¿Qué carajo es el amor?

Para leer...
Chapitas   [ Leer]
"Chapitas"
Cachito había estado rondando al grupo sin que ninguno de sus integrantes lo invitara a unírseles. Desde su llegada, el aire caldeado del puerto y la rutina soñolienta lo habían sumergido en una angustia que su tía, a quien debía respetar como una madre, le había dicho que sanara paseando y haciendo amigos. Todavía no se acostumbraba a la ciudad. Tampoco a la imponente masa de agua que lo vigilaba calle abajo. Desde su llegada, todo lo que conocía era un cuartito en un complejo de edificios de alquiler. Y el callejón de Alto Alianza que terminaba de cara al malecón.
Los días de vacaciones que restaban antes de empezar clases en un colegio diferente, con niños diferentes, parecían interminables. Durante aquellos días lo único que hacía era deambular por los callejones aledaños. Lanzaba piedrecillas en los pocitos del malecón y zumbaba entorpecido bajo el toldo de su tía rodeado de verduras. Igual que una mosca de los contenedores de basura, al final del mercadillo... [ Continuar con la lectura ]